Una de las situaciones más desagradables a las que un trabajador puede enfrentarse durante su vida laboral es la de un despido improcedente durante la baja. Conocer tus derechos como trabajador y entender cuáles son los pasos a seguir para proteger tus propios intereses es esencial en todos los ámbitos laborales, pero sobre todo en esta circunstancia.
Todos los trabajadores que se encuentran de baja médica tienen sus derechos y, por lo tanto, una empresa que los viole puede estar cometiendo un agravio denunciable. En la actualidad, existen diversas leyes en España que regulan este tipo de procedimientos y que se encargan de proteger y amparar a los trabajadores, por lo que si te encuentras en una situación de este estilo queremos traerte una guía para que entiendas cómo actuar si te despiden estando de baja.
A continuación, ponemos a tu disposición algunas claves que necesitas entender si quieres saber qué hacer si te echan del trabajo mientras estás de baja. Queremos explorar los aspectos legales de esta situación, cuáles son tus derechos como empleado y qué acciones puedes tomar contra la empresa en el caso de que quieras denunciar un despido estando de baja.
¿Te pueden despedir estando de baja?
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que la empresa sí puede notificarte el despido durante una baja o una incapacitación temporal. Lo más habitual en estos casos es que aunque te despidan durante el proceso de baja, la empresa no alegue que el despido se debe a esta baja, sino que buscará otros motivos para efectuar dicho despido. Aun así, en el caso de que tú como empleado estés convencido de que te despiden simplemente por estar de baja sin que haya otro motivo, el despido podrá calificarse como nulo.
Hay que tener en cuenta que existen diversos protocolos y protecciones legales para los trabajadores que se encuentran de baja médica y que, por lo tanto, las razones para el despido deben estar directamente relacionadas con el rendimiento laboral, razones económicas o con el incumplimiento de ciertas políticas empresariales u otros aspectos. Sin embargo, nunca deben relacionarse con la discapacidad o la enfermedad del trabajador. De no ser así, no existiría justificación legal para este despido y, en consecuencia, el empleador debería readmitir al trabajador en su puesto de trabajo.
Entendido esto, las causas más habituales que utilizan una empresa para aprovechar la situación de baja de un trabajador y despedir al empleado son las siguientes:
- Despido disciplinario. Aquí la empresa utilizará esta baza para echarle la culpa al trabajador por haber incurrido en un comportamiento grave. En estos casos, el comportamiento del trabajador deberá haber precedido a esta situación de baja.
- Despido objetivo. La siguiente situación es la que se da cuando la empresa utiliza motivos por causas organizativas, técnicas, económicas o de producción para llevar a cabo el despido. Aquí el problema no nace directamente en un comportamiento del trabajador, sino de que la empresa necesita prescindir de este puesto de trabajo.
- Despido objetivo por ineptitud sobrevenida. Este último caso nos lleva a otra situación en la cual la empresa se respalda de nuevo en causas económicas u organizativas, pero sí que le echara la culpa al trabajador por no haber sido capaz de adaptarse a un cambio en su puesto de trabajo o por no ser el más adecuado para desempeñarlo.
Contingencia común o profesional
Pese a esto, es más común de lo que parece que una empresa despida a un empleado por enfermedad común o por una incapacidad temporal. Toda la información relacionada con esta irregularidad puede encontrarse en el artículo 17 del Real Decreto 625/1985, que pone en conocimiento a los usuarios de la ley 31/1984. Asimismo, también podemos acudir al artículo 222 del Real Decreto Legislativo 8/2015, que hace referencia a la Ley General de la Seguridad Social.
En estos documentos que comentamos, se pone a disposición de los ciudadanos toda la información relacionada con los derechos de los trabajadores en el caso de que este se vea en el paro tras haber sido despedido mientras se encontraba de baja. Un aspecto esencial que hay que considerar es si la incapacidad temporal se relaciona con una contingencia común o con una contingencia profesional, puesto que en el caso de darse por malas condiciones laborales, este sería un caso de disputa clarísimo.
A la hora de que la baja se deba a una incapacidad temporal que deriva de una contingencia común, el empleador pasará a una situación de paro automáticamente y continuará cobrando una prestación por esta incapacidad. Por otro lado, si la incapacidad deriva de contingencias profesionales, el empleado continuará percibiendo esta prestación hasta que el período finalice y después pasará a verse en una situación legal de desempleo. En ambos casos el trabajador sí tendrá derecho a paro.
Cómo actuar si te echan del trabajo durante la baja
Aun así, como puedes imaginarte, en el caso de que recibas una carta de despido estando de baja existe un plazo para poder impugnar dicho despido. Lo habitual será presentar la papeleta de conciliación y la demanda dentro de los veinte días hábiles a partir del día siguiente de la fecha que se asocia a la del despido. Para ello, lo normal es que el trabajador se entere de dicho despido a través de un burofax, carta, email u otro proceso escrito.
En el caso de que el trabajador se haya enterado de dicho despido sin haber recibido una carta o que se haya ejercido un despido verbal, será el empleado quien deberá solicitar a la empresa una explicación por escrito, o de lo contrario se consideraría dicho despido como un despido tácito. Sin embargo, ya hemos mencionado que lo común es recibir una carta de despido. De ser así y no estar conforme con la baja, se tendrá que firmar esta carta como recibida, pero poniendo que no estamos conformes para que el despido no sea aceptado.
En esta situación, lo lógico será analizar los motivos del despido conforme se indican en la carta para valorar si el despido es procedente o improcedente. Ya hemos mencionado que ninguna empresa va a citar explícitamente que se despida un trabajador por el hecho de estar de baja, pero por ello los motivos que utilicen para la justificación de la baja serán determinantes para poder impugnar dicho despido o no. Es importante tener en cuenta que si el trabajador ha mostrado comportamientos indebidos previamente a la baja, la empresa puede utilizar esto en su contra y aprovecharse del proceso de baja para finalizar el contrato.
Cómo denunciar un despido al estar de baja
Si no existe ningún motivo de peso para dicho despido, queremos contarte cómo denunciar un despido indebido. Aquí te resolvemos la pregunta qué tengo que hacer si me echan estando de baja, puesto que es clave para que tengas una oportunidad de sacar a reducir tus derechos como trabajador y poner las cartas sobre la mesa. Lo principal va a ser contar con asesoramiento legal de calidad y, por lo tanto, acudir a un bufete de abogados que nos puede ayudar durante todo este proceso.
Ya hemos comentado que para que el despido resulte válido, la empresa deberá demostrar que existen causas justificables de dicho despido. Unos buenos abogados se encargarán de defender que estas causas no existen y que el motivo real del despido ha sido la propia baja. Para ello, el proceso de denuncia deberá comenzar con la papeleta de conciliación y la demanda, como ya hemos dicho antes. Así, la fase de conciliación será el primer paso, en el cual la empresa y el trabajador tratarán de llegar a un acuerdo.
En el supuesto de que estas dos partes no puedan dialogar y la empresa continúe alegando que el despido se debe a otras causas ajenas a la baja, el trabajador está en su derecho de pasar a los tribunales. Aquí se continuará con la reclamación, pero serán los jueces quienes analizarán todas las pruebas que aportan tanto empresa como empleado y determinarán el tipo de despido conforme a su propio criterio. Lo más habitual es que este despido sea o bien procedente, improcedente o nulo.
En el primer supuesto, el trabajador perderá el juicio y la empresa logrará demostrar que el despido era por causas distintas a la baja. En los dos tipos de despidos siguientes nos encontraremos ante una situación en la cual la empresa no sea capaz de demostrar la veracidad de dicho despido. Esta, por lo tanto, deberá acarrear con las consecuencias. La primera de ellas será readmitir al trabajador en su puesto de trabajo, y la segunda será pagarle los pagos que le corresponden al periodo de tiempo en el cual este ha estado despedido. En algunos casos deberá indemnizar al trabajador.